jueves, enero 12, 2006


RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIAL, UN DESAFIO PARA LAS ORGANIZACIONES.

Por Mauricio Castro Jara, Publicado en el Diario Siete el 27 de Junio del 2005

La responsabilidad social surgió a fines de los ‘90, en torno a las preocupaciones sobre globalización, a las presiones de grupos ambientalistas y de consumidores, a los constantes cambios en los criterios de producción, al desarrollo de nuevas normativas, a la firma de acuerdos internacionales, a las exigencias de los mercados; preocupaciones que han influido progresivamente para que las organizaciones vean en el desarrollo sustentable una meta a cumplir y para lograr este objetivo ha surgido una tendencia dentro del mundo empresarial, denominada Responsabilidad Social Empresarial (RSE), donde las empresas no deben limitar su accionar a la generación de riquezas o a la creación de empleo, sino que a temas como; la ética empresarial, la ciudadanía corporativa, los valores éticos, las personas, la integración con la comunidades, el medio ambiente y el marketing responsable, llegando a ser un factor competitivo clave de las Empresas modernas.

En 1999, el Secretario General de la ONU, impulsó en el Foro Económico Mundial en Davos Suiza, la idea de un Pacto Mundial de las Naciones Unidas (Global Compact) en materia de responsabilidad social de las empresas, iniciativa de compromiso ético destinada a que las organizaciones de todos los países acogieran como una parte integral de su estrategia y de sus operaciones, diez Principios de Conducta y Acción en el ámbito de: los Derechos Humanos, las Normas Laborales, el Medio Ambiente y la Lucha contra la Corrupción, con el fin de promover una conciliación de los intereses y procesos de la actividad empresarial, con los valores y demandas de la sociedad civil, los proyectos de la ONU, las Organizaciones Internacionales, las Organizaciones Sectoriales, los Sindicatos y las ONGs.

Sí consideramos que en un plazo de tres años estará disponible la norma ISO en Responsabilidad Social, que permitirá contar con un estándar que sirva de orientación mundial. Extensiva a todo tipo de organizaciones, por lo que se privilegio el concepto Responsabilidad Social y se elimino la palabra empresarial. Esta norma será una guía, no certificable, pero si verificable, compatible con las normas ISO 9000 y 14000; y con estándares internacionales, como el Global Compact, entre otros. La ISO de Responsabilidad Social será considerada la tercera generación de estándares de calidad.
Por tanto, la RSE, establece una relación de desarrollo conjunto con todos los grupos de interés de la organización (los accionistas e inversionistas, los trabajadores, los consumidores, los proveedores, la comunidad, las organizaciones sociales, el gobierno y otros stakeholders), ampliando los objetivos empresariales a componentes ambientales y sociales, promoviendo relaciones duraderas de beneficio mutuo en la cual la empresa realiza sus actividades, que van más allá de un mero cumplimiento de la legislación.

Lo anterior implica una nueva visión de negocios, la cual debe ser concebida, planificada, y evaluada, como un amplio set de políticas, prácticas y programas integrados en la operación empresarial, que ayuden a la toma de decisiones y sean reconocidos explícitamente por la administración, contribuyendo al logro de objetivos estratégicos de la organización, permitiendo a su vez mejorar su competitividad y su sustentabilidad.

El Enfoque de Responsabilidad Social Empresarial se traduce finalmente en alcanzar un mejor rendimiento de las personas y en el uso eficiente de los recursos, por lo tanto, gestionar en forma estructurada e inteligente los temas de Responsabilidad Social puede generar valor económico al negocio y beneficios a todas las partes interesadas.

Por tanto, una RSE bien gestionada permitirá identificar y generar oportunidades para avanzar en los objetivos de las empresas y las organizaciones.

En Chile, se han estado desarrollando algunas iniciativas en torno a la RSE; seminarios, programas de capacitación, estudios, investigaciones y programas de implementación, desarrollado por Universidades, algunas ONG’s y asociaciones empresariales, que han permitido dar los primeros pasos para la implementación de la Responsabilidad Social Empresarial u Organizacional.

La RSE en resumen, frente a las fuertes mutaciones y nuevas tendencias internacionales y nacionales. El papel de las empresas y los gobiernos, puede dar lugar a una masa crítica a favor de una nueva manera de hacer desarrollo y de hacer negocios. La premisa es generar capital social para contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas. Capital social entendido como interdependencia, participación, cooperación, compromiso, responsabilidad, solidaridad. Desde el punto de vista empresarial, esto requiere de un empresariado mas comprometido con el bien y el desarrollo de la comunidad. Generando enfoques innovadores, mejorando la capacidad del sector privado para promover el desarrollo sustentable.